La violencia socio-familiar y la de género son de suma preocupación para la sociedad en su conjunto y su fuerte prevalencia actual la transforma en un serio problema intersectorial e interdisciplinario y requiere de políticas integrales para su prevención y tratamiento. Este trabajo aborda temas como: el conflicto, la estructuración de límites como protectores al igual que el respeto a las diferencias. También la construcción de hegemonías y polarizaciones binarias asimétricas como formas de dominio y control, acompañadas por estrategias de naturalización e invisibilización. Aborda, además, las problemáticas político-económicas, de anomia y vulnerabilización vincular generadoras de violencias, al igual que los procesos de desideologización, de despolitización, de ausencia de proyectos y de lazo social como determinantes de muchas de ellas y la importancia de la nutrición estructural para establecer vínculos saludables.
Este trabajo propone, asimismo, estrategias preventivas y reparadoras del vínculo social y de los conflictos producidos en distintos ámbitos institucionales y comunitarios para sustituir el modelo punitivo, policial y/o judicializador, cuando ello es innecesario o iatrogénico. Destaca también la importancia de la ética y responsabilidad en la información de violencia. Finalmente, desarrolla medidas preventivas y atencionales y un conjunto de propuestas y sugerencias para la estructuración de vínculos saludables para la prevención y atención de distintos tipos de violencias.