La dinámica actual de las bibliotecas universitarias y/o académicas se ve sacudida por un contexto cambiante que implica la revisión de formas de pensar y de su propio quehacer cotidiano. Los usuarios han cambiado la supremacía de la red por los libros, de la rapidez por la reflexión, de la simplificación por la profundidad. Lo que prima es la capacidad de saber aprender y saber hacer. La biblioteca, como corazón o centro de las universidades, debe adaptar su tradicional manera de trabajar por funciones para pasar a esquemas más amplios, donde las competencias del empleado adquieren relevancia. Las bibliotecas, consideradas por algunos depositarias de conocimiento, pasan a constituir verdaderas usinas del mismo, con potencial enorme de multiplicación, transformación, modificación en sus usuarios concretos.
El objetivo general del presente trabajo es analizar la convergencia entre las competencias del personal bibliotecario y la calidad en productos/servicios ofrecidos en bibliotecas de tipo académico o universitario, a fin de diseñar un modelo teórico que pueda explicar la relación de los fenómenos examinados. De manera más específica, se pretende determinar cuáles son los productos/servicios ofrecidos en las bibliotecas y qué competencias se necesitan para obtener productos/servicios de calidad en las mismas.
