Sólo conociendo los espacios comunes, lo que se disputó y los términos en que se hizo, la polémica entre Boedo y Florida podrá ser vista como un elemento esencial en la constitución de la vanguardia porteña a principios del siglo XX en Argentina. Porque si, a noventa años de ocurrida, el cruce de textos entre ambos grupos sigue resultando tan atrayente como conflictivo, es porque ahí persiste un núcleo fundacional en la literatura argentina que este libro revisita.
Gabriela García Cedro en Ajuste de Cuentas, propone releer el enfrentamiento entre Boedo y Florida y devolverle la densidad de su contexto en los años veinte. Esta relectura permitirá a su vez volver a pensar algunos interrogantes: ¿Es tan cierto que entre los escritores de Boedo "no había un criterio estético válido" o que se postulaban la literatura de "mal gusto"? ¿Es justo ignorar los trabajos críticos publicados por Editorial Claridad y sólo juzgar su visión estética por algunos trabajos de sus representantes más visibles? ¿Solamente Florida se apropió del nacionalismo y de símbolos icónicos de lo nacional como el gaucho? ¿La modernización urbana fue sólo un tema que planteaban los martinfierristas? Si Boedo le debe a Florida su ingreso al arte argentino, Florida también está en deuda con Boedo.